Cosas como esta se ven todos los días en los partidos de este deporte. |
Para empezar, apenas se podría considerar una competición solamente si cada participante demostrara su habilidad, eso obviaría mucha violencia innecesaria, lo cual es el alma de todo deporte que se precie. Para empezar, los jugadores del equipo contrario tienen que evitar que el jugador que está invocando llegue a completar esta acción. Para esto pueden realizar una amplia gama de cosas que molesten, como recitar otros conjuros en alto cerca del invocador para que se equivoque y no lo consiga, tirarle del pelo, quemar el grimorio que esté usando, etc.
Obviamente, los invocadores no están indefensos. Para empezar pueden llevar al campo todos los grimorios que consideren necesarios, y para seguir tienen derecho a llevar consigo un arma contundente para la defensa personal, normalmente tratándose esta de un lucero del alba o cualquier otra arma con muchos pinchos.
Hay bastante variedad en las características de los círculos de invocación, pero los de corazoncitos no se suelen usar en partidas serias por algún motivo. |
Por otra parte, el papel de las invocaciones no se limita a estar ahí siendo invocadas. Las invocaciones participan activamente en el partido, normalmente ayudando al equipo que las ha invocado. Las invocaciones de mayor nivel tardan más tiempo en ser convocadas efectivamente, pero tienen ataques devastadores que pueden destruir a uno o más de los miembros del equipo (oh, por si no lo había mencionado, la esperanza de vida de uno de estos invocadores suele ser bastante baja) e incluso invocar a otras bestias por su cuenta. Sin embargo las invocaciones de menor nivel requieren menos tiempo para que su hechizo de convocación sea recitado correctamente, pero tienden a ser más débiles (mucho más fuertes que un humano medio, de todos modos) y no distinguen a los miembros de un equipo de los de otro, por lo cual normalmente se acaban comiendo a su propio invocador, haciéndose desaparecer a sí mismos en el proceso y anulando el punto que había dado esa invocación al equipo.
Básicamente eso es lo más importante del juego. Sin embargo, obviamente, no todas las jugadas están permitidas. Por ejemplo, con respecto a las muertes de los jugadores, un jugador no puede matar directamente a otro (eso suele descalificar a su equipo durante el resto de la temporada), aunque (como se puede deducir por lo anteriormente dicho) una bestia arcana puede cargarse a cualquier jugador que desee sin ninguna clase de penalización.
El toque curativo está TAN PROHIBIDO que ni siquiera pasa (la mayor parte del tiempo). |
Además, no se pueden usar canalizadores para las invocaciones: ni pokéballs, ni pergaminos, ni nada que favorezca directamente la invocación. Asimismo, el invocador tiene completamente prohibido invocar a la bestia arcana en su propio cuerpo, básicamente porque de este modo la federación no tiene que pagar derechos de autor al shintoísmo.
Sin embargo también hay ciertas bonificaciones para los jugadores de este deporte, normalmente definidas por el árbitro, pero algunas ampliamente extendidas por todo el mundo. Por ejemplo, las invocaciones de un equipo contarán el doble si ese equipo ha destruido a un fundamentalista religioso que entre al campo de juego a quejarse (cosa que no dejan de hacer por algún motivo). Asimismo, si una bestia invocada sale a causar el caos en la ciudad más cercana, el equipo que la invocó gana automáticamente. Este es uno de los sistemas para alcanzar la victoria más comunes a día de hoy.
Seguro que no soy el único al que le molaría ver un anime gore sobre este gran deporte.
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