Dadiván

 

Desde que en los inicios de Monifate os pusimos esta imagen que adjuntamos, año tras año en estas fechas os hemos hablado de la Dadiván de tal forma que hasta forma parte del nombre de uno de los meses de nuestro calendario particular hemos hecho algún intento de explicaros lo que era en realidad y lo que representaba, pero nuestras interpretaciones de los textos que sacamos de la otra dimensión gracias a nuestra impresora 4D estaban bastante desencaminadas. Este es un momento histórico, pues nos comprometemos a relataros la verdad sin tapujos en lugar de tratar de escabullirnos soltando cosas crípticas como solemos. Los libros de historia hablarán sobre nosotros durante eones.

Dadiván, tal como se celebra en la Thierra, es el día en el que Je-sus Wang terminó de desarrollar y puso en marcha con éxito el consumismo. 

pero, bonifate, kien es es e Jesus one? k invento el consumismo’?

A eso voy, querido lector. Je-sus Wang es un héroe popular de la Thierra, mitad mito y mitad realidad. Algunos estudiosos de mitografía aseguran que en todas las versiones paradójicas de navidad participa también un tipo llamado Je-sus de una forma u otra. El mito que se refiere a Dadiván asegura que fue él quien abrió el primer bazar chino de la historia, lo que se considera el hito fundacional del consumismo.

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No obstante hay otras historias relacionadas con Wang en las que también participan conocidos personajes dadivaneños como Papá Noel Sandía. Esto, unido al hecho de que los mitos de Je-sus Wang se han ido entrelazando con la doctrina de otras religiones extendidas en Himandia como el ctholhicismo o el sachanismo nos condujo en su día a una versión bastarda de los orígenes de esta festividad. Pero hoy nos hemos propuesto aclararlo todo.

Nuestra versión estaba fuertemente basada en otro mito de Wang que más tarde fue muy modificado por el ctholhicismo al identificarse al árbol de saturnalia con Shub Niggurath. La historia original cuenta que Wang se paseaba tranquilamente por un campo de sandías cuando vio a Papá Noel Sandía a punto de terminar de madurar y notó gran poder en él, de forma que lo separó de la mata y le talló el sereno rostro que ha tenido desde entonces. Otras versiones añaden que los Reyes Vagos también pasaban por ahí no haciendo nada en especial hasta que empezaron a tomar drogas o que el dueño de la plantación de sandías los echó a todos a tiros, tras tomarlos por ladrones de etnia gitana.

En otro mito similarmente convulso Je-sus Wang plantó unas judías mágicas que consiguió en Pastelina y, de ellas, nació un enorme árbol de saturnalia que creció hacia el cielo hasta apuñalar una estrella. Lejos de amedrentarse, Je-sus lo usó para trepar hasta el palacio del dios dragón del cielo y robar su tesoro. El final de la historia no está claro. En unas versiones, los dios castigan a Wang por su osadía. En otros, vive feliz hasta el fin de sus días con su madre.

Sea como sea, el hecho de que en la Thierra el hecho de que Papá Noel sea una sandía se debe a un año en el que el Halloween de verano se atrasó mucho debido a un invierno especialmente caluroso… Algo como lo que está pasando en este año en nuestra dimensión, así que no os extrañéis si dentro de unos años empezáis a ver que la Navidad adquiere temática veraniega. Recordad que lo habéis leído aquí primero.

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Sea como sea, en la Thierra han arreglado mejor lo de que haya tantos países que digan que Papá Noel vive ahí: lo metieron en la isla voladora de Laputa sobrevolando la zona próxima al Polo Norte y todos tan contentos. Y eso elimina cualquier necesidad de renos voladores. Por otra parte, también está por ahí Papá Gnol. Ese sí que existe, pero la verdad es que solo tiene que ver con la Dadiván porque imita a Papá Noel Sandía.

Lo de los Reyes Vagos también tiene su ciencia. Todo el mundo discrepa en su número, ocupación y habilidades porque en realidad es una logia vieja como el mismo tiempo y centrada en el consumo de drogas, el sexo y la astrología. De hecho fue por ellos que se empezó a usar la palabra “camello” con el significado de “traficante de droga”, cosa que luego se filtró a nuestra dimensión por difusión pasiva.

Los doce Reyes Vagos de los que hablamos en su momento son solo miembros prominentes que acabaron entremezclándose con las leyendas, y no es raro que miembros nuevos tomen su nombre, complicando aún más las cosas. Nadie tiene ni idea de qué tienen que ver con la Dadiván, pero todo el mundo los sigue relacionando con ella y los adolescentes creen que si se portan mal les dejarán porros en los calcetines en epifanía. Cosa que a veces pasa por otra parte.

Pero la cuestión ahora es, ¿cómo se celebra este monstruo de múltiples cabezas? Pues malamente, la verdad. La festividad ha ido acumulando tanto bagaje cultural con historias con significados muchas veces dispares (y algunas hasta enfrentados) que poca gente celebra la Dadiván en su forma completa.

Lo que se suele hacer es centrarse en los aspectos particulares que más le gusten a cada uno. Lo más generalizado es rendir homenaje al consumismo que Je-sús Wang creó con tanto empeño, comprando desordenadamente en la víspera de Dadiván y en Epifanía. Algunos grupos se niegan a caer en este vicio y tratan de buscar desesperadamente el significado religioso que en realidad nunca ha tenido (siendo un caso curioso los cthólhicos, que celebran la natividad de Cthulhucristo… una vez cada 13007 años). Otros simplemente comen sandía o se dan al hedonismo extremo. La verdad es que en el fondo no es muy diferente a la Navidad.

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Por otra parte, en Pork no se lleva mucho celebrarla. O por lo menos, no se sale a comprar y hacer cosas fuera. La Dadiván coincide con la temporada de celo de lobos, por lo cual es bastante peligroso ya solo salir de casa, y mucho más hacerlo para luego montar grandes colas de deliciosa y nutritiva carne humana.

¿Os sentís más multiculturales ahora? ¿Creéis que todo esto es una chorrada y Papá Noel vencería a Papá Gnol en un combate de boxeo y con los ojos vendados? Enviadnos hatemail a nuestro correo, twitter, google plus o mediante los comentarios. Recordad que el verdadero espíritu de las Dadivanes es el odio. Y el dinero.