(De pensar)
- tr. Pensar mientras se pasea, especialmente si el objetivo del pensamiento es la planificación de horribles actos de maldad inenarrable.
- intr. Prender fuego a un bolígrafo.
roporín.
(Del marqués grropin)
- m. Medicina pensada para curar el exhibicionismo.
- m. Robot de pequeño tamaño diseñado específicamente para llevar a cabo actos de carterismo y otros hurtos.
circóndito.
(Del rino chingoding)
- adj. Contenido en un círculo que se encuentra a una gran distancia.
- adj. Condimento especialmente pensado para aderezar comida con forma circular como la tortilla o ciertos bizcochos.
vacuoro.
(De vaca y toro)
- m. Coro de voces dulces entrenado para cantar en el vacío del espacio.
- m. Aspiradora con un procesador de cuatro núcleos.
kot.
(Del inmés Đhöt)
- m. coloq. Punto final de un párrafo escrito con bolígrafo de tal forma que ha dejado un agujero el papel.
Estaba tan cabreado que hizo un kot que pensaba que iba a partir la mesa y el suelo.
barbizar.
(Del turmano zombi baaaaaar)
- tr. Extender barniz sobre la barba.
- tr. Pegarse objetos de pequeño tamaño (normalmente confeti o serrín) en la cara a modo de barba.
- tr. Convertir una obra de ficción en un producto derivado de la marca Barbie.
porricía.
(De policía)
- f. Película pornográfica ambientada en una comisaría.
perranero.
(De perro)
- m. Vendedor en un puesto de venta ambulante de perros en palo.
- m.despec. Paseador profesional de perros que se toma su trabajo demasiado en serio.
calleta.
(Del suflua caglt)
- f. Galleta hecha a partir de casquería.
- f. Trozo de piel endurecida situado en el pecho.
- f. Producto de bollería especialmente pensado para introducirse en la boca de otra persona en contra de su voluntad para hacerlo callar.
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