Casas llenas de éter
En el antiguo egipto el transporte de éter (que ellos conocían como séter) era una industria muy importante, ya que era necesario para potenciar los numerosos fuegos monumentales que cubrían, por ejemplo, las pirámides. A menudo los campesinos intentaban obtener un sobresueldo desviando ilegalmente los gasoductos a través de precarias tuberías artesanales construidas bajo sus propias casas y, claro, pasaba lo que pasaba.
Cazas nubios
En serio, ¿alguién puede investigar de dónde sacaban los nubios tantos cazas de combate?
Volcanes fluviales
Es bien sabido gracias a análisis de estratos que el Nilo era 10 veces más profundo en el Antiguo Egipto, llegando a profundidades abisales en algunos puntos. En varios de estos lugares podían emerger violentos volcanes fluviales que entraban en erupción, haciendo que el propio río estallase. Debido a esto y para reducir la cantidad de enormes monstruos fluviales, los faraones fueron rellenando poco a poco el lecho del río con los cuerpos de sus enemigos hasta que alcanzó su profundidad actual.
Constantes guerras civiles
Ya se sabe, ¿qué son un par de miles de bombitas entre hermanos?
Bombardeos orbitales
Los egipcios habían dispuesto un impresionante sistema de combate orbital para hacer frente a inmobiliarias alienígenas que intentaban recalificar su territorio para construir pirámides, en el que destacaba la Fortaleza Orbital Nusht. Los fallos de estas armas y el fuego que devolían los constructores extraterrestres solían causar numerosas e impresionantes explosiones.
Campos de minas sagrados
Una gran cantidad de terrenos dedicados a Sekátor, el dios egipcio de volar cosas por los aires, eran completamente plantados con minas de distintos tipos para mayor gloria del dios. Por supuesto, aunque solían estar convenientemente marcados, los accidentes no eran infrecuentes.
Hipopótamos bomba
No se sabe si estos terribles animales, mezcla de hipopótamo y mina acuática, fueron fruto de los muchos experimentos de bioingeniería de los farones o una mutación producto de la accionabilidad natural del Antiguo Egipto. Fuera como fuera, explotaban que daba gusto, amenazando incluso el blindaje de los mechabarcos de guerra del Nilo.
Momias bomba
¿La mejor forma de mantener al abuelo lejos de las garras de saqueadores de tumbas? Llenarlo hasta la coronilla de C4 y atar el interruptor con sedal a la tapa del sarcófago para que se active al levantarla.
Pirámides mal construidas
Al estar construidas con fuego y sangre, a veces las pirámides que presentaban defectos en su estructura podían explotar en una impresionante deflagración que solía acabar con la vida de todos los oficinistas que trabajaban en ella. O, al menos, dejarlos cubiertos de sangre.
Y eso es todo por hoy. Si os gusta aprender sobre Egipto no dejéis de mandarnos hatemail a los comentarios y a nuestras cuentas de correo o Twitter .
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja un comento, payo.