Cómo enseñar a tu perro a rellenar la declaración de la renta

Todos estamos muy ocupados y no tenemos tiempo de ocuparnos del laberinto burocrático que son los impuestos ni el dinero para pagar un gestor. Por tanto, la única solución válida que nos queda es obvia: enseñar a nuestros perros a hacer la declaración por nosotros.

Este proceso al principio puede llevar algo de tiempo, pero, una vez lo consigas, el ahorro que tendrás será enorme.

1. Consigue un perro

Si no tienes uno ya, tendrás que hacerte con uno, preferiblemente adoptado y preferiblemente que demuestre aptitudes para hacer cálculos medianamente complejos.

2. Incentiva a tu perro a que se interese por el papeleo

Dale comida y mimos cada vez que se acerque a formularios o facturas hasta que sea lo que más le guste del mundo. Algunos dueños han descubierto que ponerlos celosos recompensando al gato cuando se tumba en nuestros papeles también es efectivo.

3. Enséñale a escribir

Será indispensable para el resto del proceso, pero no debería llevarte más de una semana. Recomendamos enseñarle a escribir tanto a mano como los rudimentos de la mecanografía, dado que la administración está cada vez más digita... Perdón, no puedo acabar la frase sin reírme.

4. Consíguele un DNI y título de bachillerato falsos

Tu proveedor de confianza de documentos falsos no debería tener ningún reparo en conseguir uno para tu perro, en nuestra experiencia.

5. Apúntalo a un módulo superior de administración

EN NINGÚN MOMENTO SE DICE EN LA LEY DE EDUCACIÓN QUE UN PERRO NO PUEDA APUNTARSE A UN MÓDULO

6. Soborna al encargado de las prácticas para que no haya problemas

Tu perro tendrá que hacer prácticas al final del módulo. Puede que no haya problemas, pero hay empresas que podrían tener problemas con tener a un perro, por lo que lo mejor es que sobornes al encargado para que todo vaya sin incidente. Es más, si consigues montar una empresa falsa y hacer que el perro haga las prácticas en tu propia casa, tanto mejor.

7. Reúne toda la información

Tu cánido ya está listo para rentear como nadie ha renteado jamás, así que reúne toda la información sobre tus ingresos y relacionados y deja que el peludo haga su magia.

8. Castígalo si se olvida de deducciones

Queremos estrujar hasta el último céntimo, así que no dudes en darle una buena regañina a tu perro si no está atento a deducciones que se te pudieran aplicar, incluso si requiren algo de contabilidad creativa.

9. Vigílalo para que lo entregue todo en plazo

Los perros tienen la mala costumbre de despistarse con ardillas, comida, dormir, otros perros... Por eso, aunque no tengas que estar vigilándolo en todo momento, lo mejor es que no le quites ojo para asegurarte de que todo se hace dentro de los plazos reglamentarios.

Y eso es todo. Esperamos que esta guía os resulte útil y, si es así, no dejéis de mandarnos hatemail a los comentarios de la entrada y a nuestras cuentas de correo o Twitter. ¡Lo esperamos!