Cuenta el mito portugriego que nació de la sagrada unión entre Atenabela, diosa del amor armonioso y los juegos de palabras y Martagostinho, dios de la violencia gratuita y el mercado de valores. En tiempos previos a la fundación de Portual renegó de su padre invitando a la paz mundial y otras cosas hippies, pero acabó reconciliándose con su padre sin por ello perder su puesto como dios de la paz. Es, por ende, uno de los dioses de la paz más cabrones de la historia del multiverso.
Es especialmente recordado por haber detenido una guerra antes de que estallara asesinando con ira divina a los ejércitos de los dos países. Tras esto, no solo logró una paz absoluta durante bastante tiempo en la región, sino que nadie tuvo redaños de poner en duda su puesto como dios de la paz.
Con todo esto, no debe ser una sorpresa que las luchas de palomas durante el día de la paz tengan su origen en un ritual para complacer a esta deidad y al final todo eso haya creado conflicto entre las aves. Porque la mayor parte de las palomas adoran a este dios. Especialmente las que quieren conquistar la tierra.
Por otra parte, los adoradores de Fembrando son por lo general partidarios de las purgas como las de la película “La Purga”, es decir, durante un día (preferentemente el de la paz) puedes cometer todos los crímenes que quieras siempre y cuando no cometas ninguno durante el resto del año. Hacen contínuamente recogidas de firmas para habilitar esta medida en todo el mundo, pero no hay gobierno lo suficientemente loco como para aceptar tal cosa. Ni siquiera el de Himandia.
Algunos dicen que es también dios de las alcachofas porque están son un gran símbolo de paz. Después de todo el mundo puede dividirse en dos tipos de persona: aquellos a los que les gustan las lentejas con alcachofa y aquellos a las que no. Fembrando a menudo personifica la idea de que ambas mitades pueden reconciliarse comiendo judías en armonía. Otros que es solo porque tiene forma de pincho.
Otro de sus símbolos son las olivas, como se ve en el pico de las palomas de la paz, y a menudo pájaros y personas por igual las dejan como ofrenda en sus pequeños altares con la esperanza de que, si se llega a instaurar la purga en su país, no sean ellos los purgados.
Si te parece que este es el dios que quieres adorar o simplemente te gustaría que la purga fuera de verdad para librarte de tus vecinos, cuéntanos todos los detalles enviándonos hatemail a los comentarios o nuestro correo, twitter y google+. ¡Que paséis un feliz día de la paz!