De momento la vida inteligente ya es escasa, pero los expertos temen que esto no sea en realidad un efecto causado por el liquidillo verde, sino porque la gente piensa más con la entrepierna que con los riñones. Ya sabéis a qué me refiero.
A la mayor parte del liquidillo verde aún le queda un buen trecho para terminar de descender de los volcanes, tras lo cual la velocidad de su imparable avance se verá dramáticamente reducida al dejar de ser cuesta abajo. Por lo tanto, de momento no hay que temer por los distintos medios de comunicación. De modo que el apocalipsis más aburrido de la historia de momento no es tan aburrido como llegará a ser, así que es un buen momento para disfrutar los últimos años que estarán funcionando la tele, internet y demás. ¿Que cuál es la mejor forma de aprovecharlo decís? Está claro: haciendo acopio de todo el anime de chicas monas que quepa en vuestros discos duros y memorias portátiles. Será el recurso más valioso del nuevo mundo que nos aguarda en poco más de un siglo.
Los cuatro jinetes siguen sin dar muestras de vida. En cambio sí se tiene noticia de la llegada de los cuatro mamuts del apocalipsis, totalmente desvinculados del apocalipsis más aburrido de la historia y demasiado aburridos y molones como para ser parte de él. Algunos locos afirman haber visto a Satanás en persona comprando pieles en Puerto Banús, pero era todo un montaje del ayuntamiento de Marbella y la mafia rusa.
Los cultos milenaristas que empezaron dando tanta guerra el año pasado han perdido fuelle al darse cuenta muchos de sus fieles que esa no era la forma más fácil de lograr sexo y amor cósmico, de forma que se repartieron entre distintos gurús locos. Se sospecha que podría ser un efecto relacionado con el tedio mortal producido por el liquidillo, pero está sin confirmar. Pero no se confíen, muchas de estas pseudorreligiones siguen siendo un peligro en la sombra.
Las autoridades de algunos estados (entre ellos Azerbaijan o las Islas Caimán) empiezan a dar algunas advertencias sobre seguridad durante el apocalipsis, como por ejemplo no acudir a museos de historia natural a partir de los años 2060, pues serán de los sitios que más atraigan al liquidillo debido a todo lo que molan los dinosaurios.
Les seguimos recomendando leer la Guía para la Bida en el Apocalipsis Más Aburrido de la Historia, que iremos actualizando con parsimonia, según lo requiere la urgencia del asunto.
Ahí va un consejo por adelantado: haceos con una buena sartén y un buen paraguas. La sartén os será útil para cocinar, defenderos de los (hipotéticos) zombis más aburridos de la historia y para entreteneros fingiendo que es vuestro mejor amigo. El paraguas lo necesitaréis para cuando llueva, obviamente, ya sea liquidillo verde o una lluvia tan matrónica que ni siquiera olerá a lluvia. Avisados quedáis.
Cuídense.