Un día te tropezarás y te caerás de bruces en tu habitación de "mierda peligrosa con capacidad de alterar la realidad", con tal mala suerte que dejarás los hilos del destino de muchísima gente enmarañados unos con otros. Te llevará días, pero finalmente conseguirás ponerlos en orden.
De repente, te verás con la energía, el talento y el poder de hacer todo lo que te propongas. Como hace tiempo que lo estás dejando un poco de lado, utilizarás este subidón de energía vital para mejorar con el chelo. Tu progreso será inimaginable.
Tu libido bajará a niveles que no creías posibles. Empezarás a interesarte por una vida simple, por apreciar las pequeñas cosas, por estar en contacto constante con la naturaleza y todas esas chorradas que salen en los anuncios de comida light. Se te pasará, tranquilo.
Si eres el gemelo malo, sentirás la necesidad de crear un plan complicado y sin sentido para joder a mucha gente y/o herirlos de gravedad. Como tus maldades suelen ser a una escala mucho menor, no se te ocurrirá nada en especial y te pasarás todo el mes frustrado por el tiempo perdido. Si eres el gemelo bueno, cogerás una cepa de la gripe que surgió hace décadas a través del pescado congelado de Svalbard que siempre comes. Te tendrán que poner en cuarentena durante todo el mes.
Te comerás una pizza. Estará rica.
Sentirás un impulso irrefrenable de atacar a gente aleatoria con la que encuentres (y estarás completamente convencido de que todos ellos son hermanos tuyos). Básicamente será un mes como de costumbre, pero ligeramente menos deliberado y ligeramente más gratuito.
A pesar de que tienes todo el dinero que necesitas, y hace tiempo que has pasado del punto en el que tus gestores hacen todas las decisiones de negocios que necesitas que hagan; empezarás a vender artículos de mala calidad en un puesto de mercado. Nadie te comprará nada y perderás bastante dinero, pero seguro que has aprendido una valiosa lección, o algo.
CENSURADO
Un tipo que dice ser tu hermano saldrá de la nada y empezará a darte una paliza. Así por que sí, sin ningún motivo. Tendrán que hospitalizarte por la tontería, pero será menos grave que de costumbre.
De repente te verás extrañamente atraído hacia olores fuertes, pero entonces te darás cuenta de que alguien ha mezclado sin querer los hilos del destino y eso no es lo que se supone que tenía que pasarte. Aun así, bendecirás con un poco de tu divinidad a quienquiera que fuese a cambiarse contigo. No hay motivos para no ser benevolente.
Todo te irá demasiado bien: ganarás todas las apuestas en carreras de percebes, encontrarás dinero aleatoriamente en la calle, te harás moderadamente famoso en tu comunidad... Sin embargo, todos tus familiares empezarán a enfermar de formas terribles. Te desesperarás buscando una cura para tu maldición, pero no encontrarás nada. Por suerte, las cosas volverán a la normalidad a finales de mes.
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