Determinarás que por fin es hora de llevar a cabo lo que has estado planeando durante tanto tiempo: prepararás tus cosas y te irás a las montañas a meditar para adquirir sabiduría más allá de los límites humanos. ¿Con qué clase de inesperadas verdades iluminarás a la humanidad el mes que viene?
Decidirás centrarte un poco más en ti durante una temporada, así que te pasarás prácticamente todo el mes practicando con el chelo. Acabarás descuidando alguna que otra tarea doméstica, así que tu casa apestará durante semanas.
Intentarás tomarte un descanso de tu habitual vida de lascivia intensa, privándote de ver cualquier clase de material sexualmente explícito. Te durará exactamente dos días, cuatro horas y veintisiete minutos.
Si eres el gemelo malo, decidirás tomarte un descanso de matar a tu hermano por vacaciones, que no es bueno para la salud estar siempre con ira homicida. Si eres el gemelo bueno, irás con tu hermano a pasar las vacaciones a un spa. Será impresionantemente relajante.
Un día irás a la playa.
Decidirás tomarte el mes entero de vacaciones: no planificarás ni llevarás a cabo ninguna maldad. Todo este asunto de traer ruina al mundo empezó como un hobby, pero ahora que todo es más serio no lo disfrutas tanto. Un tiempo para ti te ayudará a recentrarte en lo que verdaderamente importa: el sufrimiento humano.
Considerarás irte de vacaciones, pero luego te darás cuenta de que realmente ya no haces nada normalmente y solo te dedicas a ganar dinero a costa de las desgracias de otros. Considerarás reducir estas durante un temporada, de todos modos.
Tendrás un mes de lo más normal, cuidando de tus tierras y tu ganado. Tu trabajo es relajado, pero continuo; no hay motivos ni necesidad de vacaciones.
Decidirás tomarte unas vacaciones de todo ese asunto de estar siempre enfermo. Por desgracia, no es algo que puedas decidir así por las buenas, así que enfermarás de todos modos. No será nada especial en cualquier caso, solo un catarrillo por haber salido a pasear a tu perro-plasmodio mascota mientras llovía torrencialmente.
Te tomarás un mes de vacaciones de obrar milagros y llevar a cabo cualquier otra clase de proezas sobrenaturales, que después la gente se acostumbra y ya no lo aprecia.
Intentarás tomarte un descanso de tu puesto ambulante de baratijas, pero caerás en la cuenta de que estás en plena temporada de turistas y no puedes permitirte perder clientes a los que se puede impresionar enseñándoles cosas brillantes como si fuesen malditos cuervos. Otra vez será.
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