1. Actúa con normalidad. Tranquilo, al menos dos de cada tres de las personas con las que tratas en el día a día no son caníbales, por lo que puedes hablar con ellos sin riesgo. Además, actuar con nerviosismo o fuera de lugar podría atraer atención indeseada que pondría en riesgo tu tuteo.
2. Asegúrate de establecer una relación de confianza mutua. Tutear a cada persona es distinto y especial a su manera. Aunque muchos de nosotros queremos ir directos al grano y marcar gol, se disfruta mucho más si antes la persona y tú os conocéis y desarrolláis una interacción más profunda que el simple intercambio de verbos en segunda persona.
3. Asegúrate de hablar en código. Es preferible que nadie vea claramente lo que te traes entre manos para evitar reacciones negativas, así que es preferible que tutees dando rodeos y de una forma intrincada para evitar oídos indiscretos. No olvidéis emplear buenas palabras en clave como "mongordo" o "bochocazo" en vez de "tú".
4. Confía en la ouija, pero no al 100 %. Aunque nuestro fiel tablero puede aportar información útil fresca de la ultratumba, las relaciones interpersonales son complicadas y su consejo no siempre es tan preciso como nos gustaría. Incluso si los espíritus dicen que debes morder a tu pareja de tuteo en un ojo, por ejemplo, usa el sentido común para interpretar la situación y decidir si no deberían ser los dos.
5. Asume que siempre hay alguien mirando. Tutearse es un asunto serio, por lo que es mejor tener siempre ojos en la espalda para asegurarse de que nadie interfiere en el punto más delicado. Recuerda: Hombre paranoico vale por tres, pero no se fía de los otros dos.
6. Evita palabras que rimen en consonante con "lámpara" o "fénix". Este tipo de términos son una forma segura de estropear tu sesión de tuteo, por lo que recomendamos hacer previamente una lista de todas las palabras que rimen con ellos para tener presente que se deben evitar a toda costa.
7. Cuenta y prepara el dinero de antemano. Nadie quiere verte sacar la cartera, coger dinero y contarlo mientras te tuteas con alguien. Es mejor que lo cuentes en otro sitio, te lo metas doblado en el bolsillo y se lo des al final con un firme apretón de manos como si no pasara nada. Recuerda ser natural.
8. Háblale de tus problemas, recuerda que llorar no te hace más débil. Recuerda que por dentro eres muy fuerte y tú puedes con todo.
9. No lleves un cuchillo a un tiroteo. Del mismo modo, no lleves una pistola a una pelea a cuchillo, que queda bastante feo. Especialmente si es la primera vez que te tuteas con las personas a las que pretendías disparar antes de ponerte en evidencia.
10. Baila solo si es estrictamente necesario. Repito: Solo si es estrictamente necesario. Un buen baile puede ser una buena forma de iniciar una sesión de tuteo solo si las circunstancias son adecuadas. Trata de fijarte en la situación antes de desempolvar tus mejores pasos.
Y eso es todo. Esperamos que os ayuden a navegar las turbias y procelosas aguas de las relaciones interpersonales y que dentro de poco podáis estar tuteando hasta al rey de Tailandia. Si os interesa el tema o queréis darnos vuestra opinión, no dudéis en pasaros por los comentarios de la entrada, nuestra cuenta de mail, de Tuiter o nuestro flamante y lustroso servidor de Discord. ¡Hasta la próxima!
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