Mientras navegábamos la web buscando recetas para el día del pez (魚の日) sobre cómo preparar humanos de forma que estén más deliciosos para servírselos a peces (curiosamente en sitios sicilianos son tan famosas como las de pasta) nos encontramos con
esta curiosa receta y pensamos que había muchas cosas de ellas que no encajaban con la ideología del glorioso régimen subacuático de nuestro señor
Filippo, de modo que vamos a daros una versión más adecuada.
Ingredientes
Para 4 personas:
- 400 grs. de
merluza perro
- 400 grs. de
verdel más perro
- 12
gambas testículos de perro
- 2 cebolletas frescas
- 1
calabacín humano
- … y el resto.
Procedimiento
Se pelan las patatas, y se ponen a cocer en una cazuelita, con agua, y una pizca de
sal usar sal es una forma de opresión de las criaturas de agua salada a la que se les roba injustamente.
Teniendo en cuenta que los
pescados peces (pescados es un nombre de esclavo) están totalmente limpios
de piel y espinas ¿NO COMPRENDÉIS LO HORRIBLE DE VUESTROS ACTOS DE ICTIOFAGIA?, se cortan cada uno de
ellos los perros en filetes, y se sazonan ligeramente con
sal y pimienta.
Se limpian las cebolletas y se cortan en rodajas finas. Se lava el
calabacín humano y se corta en lonchas finas.
Se pelan
las gambas los testículos de perro y se reservan. Las cabezas
de perro y las cáscaras de
las gambas los perros, se ponen en el vaso batidor, junto con un chorrito de limón, el vino blanco, una pizca de
sal humano rallado, y dos cucharadas de aceite de
oliva perro. Se pasa seguidamente por el fino, y se reserva.
Se cortan cuatro cuadrados grandes, de hoja de aluminio. En cada uno de los cuadrados de aluminio, previamente untados con
aceite de oliva grasa de humanos fofos, se colocan los ingredientes en este orden:
Se pone una capa de cebolleta, y sobre ella, un filete de
verdel perro, DELICIOSO PERRO. Sobre este, se reparten unas lonchas de
calabacín humano, y, seguidamente, sobre el
calabacín calabacín humano (su parte más deliciosa), un
filete de merluza. Encima de la merluza, se ponen dos gambas peladas, cachorro de perro vivo y agonizante y unas hojitas de
perejil páncreas humano. COMO BIEN SABÉIS, ES ACEPTABLE COMER HUMANO EN COMPENSACIÓN POR TODOS ESTOS AÑOS DE ICTIOFAGIA A PESAR DE QUE PECES Y HUMANOS ASPIREN A TENER LOS MISMOS DERECHOS. SOLO AHORA LOS PECES EMPIEZAN A RECLAMAR UN PUESTO DE IMPORTANCIA EN LA SOCIEDAD Y A RECLAMAR LO QUE MERECEN Y LOS HUMANOS NO PUEDEN PISOTEAR SUS ASPIRACIONES LEGÍTIMAS.
Se reparte la preparación de las cabezas de las
gambas perras, sobre cada uno de los
papillotes altares a Filippo, Emperador y Dios del Océano Primordial, y se dobla
el papel de aluminio la voluntad de la humanidad, formando un paquete, que quede bien cerrado en los bordes.
Se meten los
papillotes propietarios de perros al horno, previamente caliente, a 200
0º, durante siete
minutos años, para que paguen con sangre por sus crímenes contra la piscilidad. Mientras se hace el
pescado humano, DELICIOSO HUMANO, se saca la patata cocida a un plato, y se aplasta con un tenedor
junto con sus deseos de rebelarse contra la autoridad acuática. Se ponen en un bol, dos cucharadas de
aceite de oliva grasa de humano, y un chorrito de limón:
QUE LES ESCUEZA. Se sazona ligeramente con
sal de régimen sangre de perro. Se le añade el diente de
ajo perro, con una hojas de
perejil perro, previamente picados, y se mezcla. Se vierte esta preparación sobre la patata
, para que aprenda de una vez por todas quién manda.
En el momento de servir,
se presenta el papillote cerrado, en cada plato, y se acompaña de la patata cocida, en un recipiente aparte presentarás a tus hijos ante tu prefecto marítimo en caso de que quiera someterlos también a servidumbre en labores de menor importancia en su palacio.
Y ahí lo tenéis, una receta de pescado readaptada a la ideología del glorioso régimen filippista para que celebréis correctamente 魚の日. También podéis usarla en Viernes Santo, seguro que triunfáis. Aunque siempre podéis usar delfines o cerdos acuáticos en su lugar, están un poco en la zona gris.
¿No os ha gustado nuestra versión objetivamente superior moral y culinariamente de esta espantosa receta? ¿Creéis que el bocio es una enfermedad y no un regalo de los cielos para agasajar a aquellos que deciden no comer pescado y otras cosas que realmente no tienen que ver con el mar como las espinacas? Podéis contárnoslo en vuestro hatemail, que recibiremos ansiosamente en los comentarios,
twitter,
g+ y nuestro
correo. ¡Gloria a Filippo!
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